INTERVENTION (español debajo)
Colossians 1:20 Amplified Bible …and through [the intervention of] the Son to reconcile all things to Himself, making peace…
The concept of interventions is scary. This is where loving friends & family members of compulsive gamblers, drunks, drug addicts and mental patients ambush their fallen ‘loved one’ all at once and confront him or her with their specific problem. The person being ambushed is completely surprised because they think they are perfectly fine. It’s always awkward, uncomfortable and traumatic. No one likes it nor wants to do it, but it has to be done.
Interventions remind me of the story of the “Emperor with no clothes”. Everyone knew that the deceived emperor was naked as he proudly paraded around in his imaginary clothes, but no could break it to him. An intervention is humiliating but necessary.
The person needing an intervention is totally unaware that they even have a problem. They are delusional and self-deceived. Everyone knows they are messed, up but no one confronts them. Finally, their fed-up friends and family make a desperate last effort to save their loved one’s life.
An intervention is a rude but necessary invasion. An intervention reminds me of when I was first introduced to the Gospel. I thought my life was fine. When I truly heard the Gospel though, I was troubled to the depths of my soul. There weren’t families and friends involved, only Jesus’ Holy Spirit but it was an intervention. He kept on sending angel after angel (believers) at me until I believed.
The Gospel has that “intervention” effect on everyone. We go through life, thinking we are fine. One day, someone opens the Bible, and reads something to us like John 3:3 and we finally get it.
John 3.3 “Jesus answered and said unto him, Verily, verily, I say unto thee, Except a man be born again, he cannot see the kingdom of God.”
At first we are shocked, maybe even offended. We say things like “I am good! I don’t do bad things, I go to church and do this and that!” But our defenses sound pathetically weak, Then we finally give in and ask one of the many angels sent to us “Ok!!! how do I get born again?” We are told to go to Romans 10:9 “That if thou shalt confess with thy mouth the Lord Jesus, and shalt believe in thine heart that God hath raised him from the dead, thou shalt be saved.” We do that wholeheartedly, and we step into eternal life. That all happens after the harshness of an intervention.
Unfortunately the story doesn’t end there. We don’t go to heaven immediately when we are transformed from darkness to light. We are kept on this planet to reach others. We think we are fine once again. We are going to heaven, that’s a fact. However, we still have issues that we aren’t aware of. Again we are delusional and in self-denial. We may still be mean spirited, impatient etc. and now we have self- righteousness thrown in. Just like someone with body odor or bad breath; they are the last to know UNTIL someone tells them.
I believe Christians still need interventions until the day they die. I know Christians who really need an intervention but don’t realize it. They think they are fine, ‘perfect’ as a matter of fact. As a result, they are harsh with everyone around them. Judgmental, offensive and mean words come out of their mouths. They have annoying or bad habits. These are actions that many offending Christian aren’t even aware of.
People that love them need to tell them that they are off base. It’s embarrassing but needed. In the Bible an intervention is called admonishing. Aren’t you glad you have people in your life who love you enough to correct you?
Colossians 3:16 Let the word of Christ dwell in you richly in all wisdom; teaching and admonishing one another in psalms and hymns and spiritual songs, singing with grace in your hearts to the Lord.
We are saved, but we need to be refined. Christians love each other and we are called to help each other to shine brighter and brighter for Christ. Admonishing like I said is Christian’ese’ for Intervention.
My beautiful wife Winnie gently knocks those rough pieces off of me every day, mainly by her Christ-like character and disposition. Sometimes though, she just has to come out and tell me to shape up. Also I have many Christian brothers and sisters who love me enough to do so as well. We all do!
God will send one believer after another to tell you the same thing until your character is molded to the character of Christ (If you are humble enough to receive it). There are always things in our lives, or characters that need to be polished.
I truly feel sorry for Christians think they have ‘arrived’. It’s obvious by their actions and words. Either they have hardened their hearts to further correction, making them miss out on a lot of joy and victories in their lives, OR God in His infinite mercy and love is about to knock them off of their high horse.
We should all thank God for all the believers (angels?) that He continues to send into our lives. They sand off off all the rough edges (hopefully) until we will eventually shine for Jesus.
——–español——-
INTERVENCIÓN
Colosenses 1:20 Biblia Amplificada (AMP) … y por [la intervención del] Hijo para reconciliar todas las cosas a Sí mismo, haciendo las paces [con los creyentes] a través de la sangre de Su cruz; por Él, [digo,] si cosas en la tierra o cosas en el cielo.
El concepto de intervenciones es aterrador.
Aquí es donde amigos amorosos y familiares de jugadores compulsivos, borrachos, drogadictos y pacientes mentales tienden una emboscada a su “ser querido”, todo a la vez, y lo confrontan con su problema específico.
La persona emboscada está completamente sorprendida porque piensan que están perfectamente bien. Siempre es incómodo, y traumático. A nadie le gusta hacerlo, pero hay que hacerlo.
Las intervenciones me recuerdan la historia del “Emperador sin ropa”. Todos sabían que estaba desnudo pero nadie se lo contó. Finalmente, una niña honesta soltó la verdad delante de todos. Una intervención es humillante, pero también puede ser un evento que salve vidas.
La persona que necesita una intervención es totalmente inconsciente de que tienen un problema. Son delirantes y se engañan a sí mismos. Todos saben que están en mal estado, pero nadie los confronta. Finalmente, sus familiares y amigos cansados hacen un último esfuerzo desesperado y concertado para salvar la vida de su ser querido.
Una intervención es una invasión grosera pero necesaria. Una intervención me recuerda cuando me presentaron por primera vez al Evangelio. Pensé que mi vida estaba bien. Sin embargo, cuando realmente escuché el Evangelio, me preocupó lo más profundo de mi alma. No hubo familiares y amigos involucrados, solo el Espíritu Santo de Jesús, pero fue una intervención. Siguió enviando ángel tras ángel (creyentes) hacia mí hasta que creí.
El Evangelio tiene ese efecto de “intervención” para todos. Vamos por la vida pensando que estamos bien. Un día, alguien abre la Biblia y nos lee algo como Juan 3: 3 “Respondió Jesús y le dijo: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere otra vez, no puede ver el reino de Dios. ” Al principio estamos conmocionados, tal vez incluso ofendidos. Decimos cosas como “¡Estoy bien! ¡No hago cosas malas, hago esto y lo otro!” Pero nuestras defensas suenan patéticamente débiles, entonces finalmente nos damos por vencidos y le preguntamos a uno de los muchos ángeles que nos enviaron “Ok, ¿cómo puedo volver a nacer?” Se nos dice que vayamos a Romanos 10: 9 “que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo”. Hacemos eso de todo corazón, y damos un paso hacia la vida eterna. Todo eso sucede después de la dureza de una intervención.
Lamentablemente, la historia no termina ahí. No vamos al cielo inmediatamente cuando somos transformados de la oscuridad a la luz. Nos mantienen en este planeta para llegar a otros. Creemos que estamos bien una vez más. Vamos al cielo, eso es un hecho.
Sin embargo, todavía tenemos problemas que no conocemos. De nuevo, estamos delirando y en abnegación. Todavía podemos ser mezquinos, impacientes, etc. y ahora somos santurrones y auto justificados. Es como alguien con olor corporal o mal aliento; ellos son los últimos en saber de su problema HASTA que alguien les diga.
Creo que los cristianos todavía necesitan intervenciones hasta el día de su muerte. Conozco a cristianos que realmente necesitan una intervención, pero que no se dan cuenta. Ellos piensan que están bien. Como resultado, son duros con todos los que los rodean. Palabras críticas, ofensivas y mezquinas salen de sus bocas. Tienen hábitos molestos o malos. Estas son acciones que muchos cristianos ofensores ni siquiera reconocen. Las personas que los aman necesitan decirles que están fuera de la base. Es penoso pero necesario. En la Biblia la intervención se llama amonestación. ¿No te alegra que hay personas en tu vida que te quieren lo suficiente como para corregirte?
Colosenses 3:16 Que la palabra de Cristo more en usted con toda sabiduría; enseñando y amonestándose unos a otros en salmos e himnos y canciones espirituales, cantando con gracia en sus corazones al Señor.
Somos salvos, pero necesitamos ser refinados. Los cristianos se aman y estamos llamados a ayudarnos unos a otros a brillar más y más para Cristo.
Mi bella esposa Winnie me quita suavemente esos pedazos ásperos todos los días, principalmente por su ejemplo, linda carácter y disposición de Cristo. A veces, sin embargo, tiene que decirme que estoy equivocado. También tengo muchos hermanos y hermanas cristianos que me aman lo suficiente para decírmelo. Dios enviará a un creyente tras otro para que le diga lo mismo hasta que su carácter esté moldeado al carácter de Cristo (si es lo suficientemente humilde como para recibirlo). Siempre hay cosas en nuestras vidas, o personajes que necesitan ser pulidos.
Realmente siento pena por los cristianos que creen que han “llegado”. Es obvio por sus acciones y palabras. O han endurecido sus corazones para una mayor corrección, haciendo que se pierdan un montón de alegría y victorias en sus vidas, O Dios en Su infinita misericordia y amor está a punto de echarlos de su alto puesto.
Doy gracias a Dios por todos los creyentes (¿ángeles?) Que Dios tiene y continúamente envió a mi vida. Se lijan de todos los bordes ásperos (con suerte) hasta que eventualmente brillaré para Jesús.